Desde hace años el SEPE permitía a las personas trabajadoras afectadas por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) acceder a programas destinados tanto a ocupados como a desempleados. Con el aumento de personas afectadas por ERTE derivado de la pandemia sanitaria, el SEPE modificó la normativa para que, además, todos los trabajadores en ERTE, ya sea de suspensión total como de reducción de jornada, se consideren colectivo prioritario a la hora de acceder a cursos de formación, independientemente de que el ERTE sea consecuencia de procedimientos por causas organizativas, técnicas o de producción (ETOP), como los llamados “de fuerza mayor”.
Priorizar el acceso de las personas en ERTE a la formación gratuita es algo que ya se contemplaba en el Estatuto de los Trabajadores, pero ha sido, a raíz del estado de alarma, cuando se ha adaptado la normativa para facilitar completamente el acceso de estos trabajadores a la formación profesional para el empleo. Entre las medidas adoptadas, destaca el hecho de que los trabajadores en ERTE podrán participar tanto en los cursos de formación programados por sus empresas como en la oferta formativa de las Administraciones Públicas para personas ocupadas, independientemente del tipo y ámbito sectorial del programa. En este caso, los trabajadores en ERTE, dado que mantienen su relación laboral con la empresa, no se considerarán desempleados a efectos del límite de participación establecido, aunque se encuentren en situación de suspensión del contrato de trabajo o de reducción de jornada. Al mismo tiempo, estas personas podrán acceder a la oferta formativa para desempleados y no se contarán como ocupados a efectos de los límites de participación establecidos en este tipo de iniciativas (30% de ocupados como máximo en un curso para desempleados).
De igual manera, la Orden dictada por el Ministerio de Trabajo contempla medidas que favorezcan el acceso a la formación gratuita a trabajadores autónomos y trabajadores de la economía social (asociaciones, cooperativas, etc.), permitiendo que, al igual que las personas en ERTE, puedan acceder a los cursos gratuitos sectoriales aunque su actividad económica se desarrolle en otro sector.
Desde cursossepe.es creemos que estas medidas son acertadas, pues permiten el desarrollo personal y profesional de una forma transversal, que puede servir, incluso, para reciclarse y emprender la actividad en nuevos sectores.